¿Qué se necesita para que una persona pueda gritar al mundo que es cristiano?, ¿Cómo puede reconocerse en una persona y en una organización eclesiástica su condición de cristiano? Realmente es muy fácil adjudicarse el adjetivo de cristiano y ello se observa en un mundo donde millones de personas aseguran seguir a Jesucristo como Señor y Salvador.
Existen muchas iglesias que se incluyen en la afirmación cristiana y se muestran al mundo como tales. Hombres y mujeres de buena voluntad manifiestan ser seguidores de Jesús de Nazaret. Lo paradójico de esto es que un buen número de estas iglesias, sectas y grupos de adoración se consideran más cristianos que otros, al punto de actuar como todo lo contrario.
Se puede ser más cristiano
Sin embargo, se ha demostrado que sí se puede ser cristianos, más cristianos. Un ejemplo de ello son los mormones o Santos de los Últimos Días como prefieren ser identificados en el mundo ya que son miembros de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días y no de una Iglesia Mormona.
En este sentido, los Santos de los Últimos Días manifiestan su profunda condición de cristianos, más cristianos puesto que el ser llamados cristianos implica mucho más que un agregado adjetivado del ser humano; significa el demostrar amor puro al prójimo y seguir los pasos que el Salvador mostró como camino perfecto de salvación y vida eterna.
Cualidades cristianas
El élder Robert D. Hales, en su discurso: “Ser un cristiano más cristiano”, en la Conferencia General y publicado en la revista Liahona, de noviembre de 2012, testificó que en Jesucristo y “por medio de Su infinito amor y gracia, podemos llegar a ser cristianos más cristianos”.
Así mismo, el élder Hales destacó ciertas cualidades que integran el poderoso adjetivo de ser cristiano y demuestra el profundo conocimiento del amor del Salvador y de Su identidad como Hijo de Dios y de Su dirección Divina de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días.
Entre las referidas cualidades están: El amor, la fe, la conversión, el perdón, la paz, la paciencia, el servicio, el afecto, el sacrificio y la perseverancia cristiana hasta el fin. Según detalla este hombre inspirado y al servicio de Dios, el poseer estas características de Jesucristo demuestra la mejor y mayor condición del significado de ser cristiano. Estos son quienes escuchan y obedecen la voz del Salvador.
Defensores de la verdad
Los Santos de los Últimos Días cuentan con las verdades plasmadas en La Santa Biblia, donde se encuentran registrados los acontecimientos y enseñanzas de Dios para la humanidad. Los mormones leen La Santa Biblia y la defienden, a pesar de reconocer que las filosofías de los hombres, y con ellas el error, han intentado borrar verdades eternas de ese santo documento.
Asimismo, los Santos de los Últimos Días creen que Dios sigue revelando verdades eternas por medio de sus representantes en la tierra como lo son los profetas vivientes, quienes poseen las llaves del sacerdocio en la actualidad y luego del tan importante evento conocido como La Restauración del Evangelio en el siglo XXVIII y por medio de José Smith.
Un hecho sin igual
A partir de este momento tan vital en la historia cristiana mundial, la Restauración del Evangelio, otras escrituras sagradas salieron a la luz como lo es El Libro de Mormón, Otro Testamento de Jesucristo; texto inefable que contiene las verdades eternas e inalteradas dadas por Dios a profetas antiguos y que dan a la humanidad aquello que fue arrebatado, transformado y distorsionado de los otros testamentos sagrados.
Las revelaciones del Salvador continúan en la actualidad y los Santos de los Últimos Días o mormones demuestran que siguiendo las verdades eternas plasmadas en los libros canónicos de La Iglesia de Jesucristo, como los son La Biblia, El Libro de Mormón, Doctrina y Convenios y La Perla de Gran Precio, así como otras publicaciones reveladas por Dios y a través de Sus profetas vivientes se puede ser cristianos más cristianos y que su condición de tal, deja de ser solo un adjetivo para convertirse en una palabra de acción real y verdadera.
El profeta José Smith testificó en cuanto al Salvador Jesucristo según lo registra uno de los libros canónicos de La Iglesia de Jesucristo, conocido como Doctrina y Convenios, en la Sección 76, versículo 22: “Y ahora, después de los muchos testimonios que se han dado de él, éste es el testimonio, el último de todos, que nosotros damos de él: ¡Que vive!”. Los mormones son cristianos; conocen al Salvador y lo siguen como lo que es: El Gran Pastor de La Iglesia verdadera.
Miembro de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, donde sirve como Obispo del Barrio Unión, Estaca Los Sauces, Valencia-Venezuela. Periodista (Comunicador Social, mención Desarrollo Social), egresado de la Universidad Católica Cecilio Acosta en Venezuela. Magister en Teaching Higher Education, egresado de la Caribbean International University.